Una refrescante y saludable ensalada que combina la crujiente lechuga con la dulzura de las manzanas, ideal para acompañar cualquier comida o disfrutar como un plato ligero.
Instrucciones
Paso 1
Lavar y secar la lechuga. Cortarla en trozos grandes y colocarla en un bol grande.
Paso 2
Lavar, pelar y cortar las manzanas en rodajas finas. Añadirlas al bol con la lechuga.
Paso 3
Añadir las nueces y el queso azul desmenuzado al bol.
Paso 4
En un recipiente pequeño, mezclar el aceite de oliva, el vinagre de manzana, la sal y la pimienta.
Paso 5
Verter el aderezo sobre la ensalada y mezclar bien todos los ingredientes.
Paso 6
Servir inmediatamente o refrigerar hasta el momento de servir.