Deliciosos mejillones rebozados sin cáscara, crujientes por fuera y jugosos por dentro, perfectos como aperitivo o plato principal. Siguiendo esta receta paso a paso, obtendrás un resultado espectacular en poco tiempo.
Instrucciones
Paso 1
Lava y limpia los mejillones sin cáscara. Sécalos bien con papel de cocina.
Paso 2
En un bol, bate los huevos con una pizca de sal y pimienta.
Paso 3
En otro bol, coloca la harina. Y en un tercer bol, coloca el pan rallado.
Paso 4
Pasa cada mejillón primero por la harina, luego por el huevo batido y finalmente por el pan rallado, asegurándote de que queden bien cubiertos.
Paso 5
Calienta el aceite vegetal en una sartén profunda a fuego medio-alto.
Paso 6
Fríe los mejillones rebozados en el aceite caliente hasta que estén dorados y crujientes, aproximadamente 2-3 minutos.
Paso 7
Retira los mejillones con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Paso 8
Sirve los mejillones rebozados calientes, acompañados de tu salsa favorita.