El ajoblanco cordobés es una sopa fría típica de la gastronomía andaluza, refrescante y perfecta para los días calurosos. Se elabora a base de almendras, pan, ajo y aceite de oliva, lo que le confiere un sabor único y delicioso.
Instrucciones
Paso 1
Remojar el pan en agua hasta que esté bien empapado.
Paso 2
Escaldar las almendras en agua hirviendo durante unos minutos, retirar la piel y reservar.
Paso 3
En una batidora, agregar las almendras, el pan remojado y escurrido, los dientes de ajo pelados, el agua, el aceite de oliva, el vinagre y la sal.
Paso 4
Batir todo hasta obtener una mezcla homogénea y suave.
Paso 5
Pasar la mezcla por un colador fino para eliminar cualquier grumo o trozo grande.
Paso 6
Refrigerar el ajoblanco durante al menos 2 horas antes de servir para que esté bien frío.
Paso 7
Servir el ajoblanco en cuencos individuales y decorar con uvas, trozos de melón o jamón serrano, si se desea.