Una deliciosa tarta salada que combina espinacas frescas y huevos duros en una masa crujiente. Perfecta para cualquier comida del día y fácil de preparar.
Instrucciones
Paso 1
Precalienta el horno a 180°C.
Paso 2
Lava y corta las espinacas. Pica la cebolla.
Paso 3
En una sartén, calienta el aceite de oliva y sofríe la cebolla hasta que esté dorada.
Paso 4
Añade las espinacas a la sartén y cocina hasta que estén tiernas. Sazona con sal y pimienta.
Paso 5
Extiende la masa de hojaldre en un molde para tarta y pincha el fondo con un tenedor.
Paso 6
Coloca las espinacas y la cebolla sobre la masa de hojaldre.
Paso 7
Corta los huevos duros en rodajas y colócalos sobre las espinacas.
Paso 8
En un bol, mezcla la nata líquida con el queso rallado y vierte la mezcla sobre los huevos y las espinacas.
Paso 9
Hornea la tarta durante 30-35 minutos o hasta que esté dorada y firme.